Estrés, ansiedad, angustia, insomnio, etc.

Si sufris de estrés, ansiedad, angustia, insomnio, etc., la psico-naturopatía puede ayudarte a superar estas afecciones, ya sea desde un punto de vista puramente físico, como desde un punto de vista psíquico, o bien desde una visión global que utilice ambas disciplinas para sanar.

Un poco de contexto:

Muchos expertos consideran que el estrés es la enfermedad de mayor impacto en la actualidad. Está causado por una relación entre la persona y el entorno en la que el sujeto percibe hasta qué punto las demandas del entorno constituyen un peligro para su bienestar, y si superan o igualan sus recursos para afrontarlas.

Sus consecuencias pueden incluir una amplia gama de afecciones y enfermedades, como disminución de las defensas, problemas de piel y cabello, obesidad, enfermedades cardíacas, diabetes e incluso depresión y/o pérdida de memoria, entre muchas otras.

Los síntomas del estrés, si se vuelve crónico, pueden afectar a tu cuerpo y a tus emociones, y a menudo incluso modificar tu comportamiento.

La ansiedad es un estado de inquietud provocado por la anticipación de un peligro y da lugar a muchos síntomas psicológicos y a una sensación de desastre o peligro inminente. Hasta cierto punto, la ansiedad es un mecanismo humano normal y adaptativo que intenta protegernos del peligro. El problema es cuando esta ansiedad se vuelve crónica o duradera.

La ansiedad puede manifestarse de diversas formas:

Inquietud, angustia, sensación de peligro o amenaza, deseo de huir o atacar, inseguridad, celos, desconfianza, dificultad para tomar decisiones.

Desde el punto de vista físico, puede haber temblores, sacudidas o inquietud, tensión o dolor muscular, síntomas de hiperactividad, sensación de ahogo, palpitaciones o taquicardia, sudoración o manos frías y pegajosas, sequedad de boca, náuseas, problemas intestinales, escalofríos, sensación de nudo en la garganta y dificultad para tragar. También síntomas de hipervigilancia, como dificultades para dormir, irritabilidad, etc.

La angustia, por su parte, tiene un efecto inmovilizador y se define como una emoción compleja, difusa y desagradable que también tiene consecuencias psicológicas y orgánicas. Es un sentimiento ligado a situaciones de desesperación, en las que el sujeto pierde la capacidad de actuar voluntaria y libremente.

El insomnio puede deberse a razones físicas o psicológicas, y también puede ser consecuencia del estrés o la ansiedad.

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